Encuentro subterráneo.

Después del “paseo turístico” por el mundo humano, Kazan volvió a las noches, esperando poder descansar un poco en su dormitorio sin tener que hacer nada mas, infelizmente no fue así. Antes si quiera de llegar a la puerta de su dormitorio, oyó por los pasillos una reunión de espadas, al parecer había empezado la “fiesta” sin la primera espada. Aun que esto no le importaba, al revés, le supo mal haberlo oído ya que ahora era su obligación comparecer, y quería descansar.

En fin, Kazan dio media vuelta por los pasillos de las noches, mientras andaba, permanecía cabizbajo, con las manos enfundadas en sus bolsillos y sus ojos entrecerrados, casi se podría decir que no se chocaba con algo por instinto.
Mientras este iba en camino hacia la sala de reuniones, arrastraba sus pies por el suelo, parecía estar algo vago para levantarlos correctamente al andar, el ruido se oía desde bastante lejos.

Llegando a la zona donde se encontraba el acceso hacia el subterráneo, donde supuestamente se encuentra la sala de reuniones, este empezó a bajar por la oscuridad de las escaleras, seguía sin cambiar su expresión, ni tampoco su aspecto corporal/físico, por así decirlo.

Al llegar al final, tres espadas ya estaban presentes, una de ellas la conocía de físico y cara, a los otros dos apenas los reconocía, simplemente sabía que eran espadas, no se fija en nadie, apenas en las personas… digamos, que en las personas que le “interesan”.
La bella figura de la soberana era llamaba la atención hasta antes de poder verla claramente, cuando llego al subterráneo, en la otra cabeza de la mesa, desenfundo su mano derecha del bolsillo y la coloco en su abdomen, juntando las piernas se inclino hacia delante, haciendo una reverencia a la soberana, única persona a la que saludo y en pocas palabra,

Un honor volver a verla, Clare-Sama.

Acto seguido se acerco a una de las sillas del lado izquierdo de la mesa, lo mas apartado posible de los demás espadas, dejando su tatuaje visible, y se sentó suavemente.

Mientras que yo permanecia dormido en cualquier otro lugar , pero no tan alejado de los demas espadas , ya que no me gustaba estar nunca solo , sino con compañia por tan mala que sea , le diera una leccion , pero lo mas importante esque ahora todas las energias se movian , cada espada se dirigia a un lugar mientras yo aqui hechado , apoyado en mis manos detras de mi frente contra el suelo , con aquellos ojos amarillos y negros completandolo me levante para llegar a aquella ocasion de encuentro.

Entonces camine , no tan apresurado ni tan lento , pues la quinta espada , al igual que la cuarta no se encontraban cerca , asi que seguramente ellos ya se habian adelantado , mientras que la tercera de los espada , ya podia sentir , que estaba con los demas espadas . La primera espada tambien se hallaba ahi , mientras que cada vez , mas cerca me encontraban del lugar ,
dentro del palacio donde algo , se decidiria , y eso era aburrido , pero lo bueno es que habia gente ahi , unos 4 espadas , entre los rangos mayores , y eso era divertido.

Entre al lugar indicado , donde vi a un tipo de pelo blanco hacia atras , algo reluciente , despues a una mujer , seguramente la espada , quien para mi era algo extraña y que escondia algo , mientras que el otro espada con capucha al igual de el de mascara , no pensaba que habia otro espada con casi su mascara , pero a diferencia de mi , yo tenia puesta esta mascara , se encontraban ahi , con la mayor espada , que al decir verdad , no era como nosotros y que hasta ahora no habia preguntado su nombre , no sabia su nombre ni el de los demas a pesar de que me gusta estar en grupos , ya que solo suena aburrido.

Pero , se habia rumorado , de que aquella mayor , era una shinigami y seguramente es asi , pero en fin , mis calculos en ella y el de la mujer andaba algo lejano , pero que tarde o temprano se acercaria al hilo de la muerte , donde sucederia.... y que tambien que se llamaba Clare , la supuesta Ama del HuecoMundo , una situacion entre todos los espada , para derrotar a los shinigamis , pero yo me preguntaba , que tan rapido era esta situacion , si esque atacariamos a la SS o si atraeriamos a los shinigamis en el mundo humano , pero en fin , el segunda espada se situo , con aquella vestimenta negra , y aquella mascara rara , que parecia sin dudar , un vizard , que nadie sabia la verdad de ello....

Clare no ..?...Dije de una manera burlona y clara , mostrando la palabra primero ya que pareciera , como si , nuestra mami y papi , nos sitaran a una conversacion seria de que , " que haras " en el resto de lo que queda en tu vida. Su manera de comportarse asi , era , porque es el mas joven de todos , pues , a pesar de ser un espada , deberia de ser un bebe hollow o algo parecido.

Imposible. El olor de aquel perfume aún evocaba pensamientos. El enervante olor de flores y madera discurría hasta sus ojos delatando un inusual brillo. Concebiría su meta con o sin exhibicionismo. Y no titubeaba en mermar la vida de todo río mal encausado. Pero su sorpresa era mayor al saber que los shinigamis perecían bajo su propia soledad. Jóvenes e inexpertos, ansiosos de todo cuanto se mostraba a sus ojos. Si estuviese ahí se retorcería en su lecho al ver a las nuevas generaciones con desbordante poder y escasez de cesos.

Su meñique recorrió su ceja y su mirada se posó en todos los espadas. También saludo, cuando todos estuvieron presentes, en un barato ademán con la diestra. Esa ocasión cortó el pasado que una vez amó. El ahora vislumbraba en una precipitada visita a la sociedad de almas que no representaría reto alguno, para ninguno. Su decepcionante actitud los obligaba siempre a dar el primer paso, los otros no tenían pizca de coraje, de interés. Las espadas eran los brazos y no temía a su desobediencia pues sólo eran artefactos bélicos y como tal podían ser destruidos.

Inhaló profundamente. Era tan sencilla y tan difícil, tan profunda y tan vacía. Los retendría ahí el tiempo que fuera y no dejaría marchar a ninguno sin alguna instrucción. Hacía tiempo mirando el centro de la mesa con un propósito de desafío.-Seré breve, concisa. Stéphane y Neus provocarán a los shinigami en Karakura, el encuentro debe ser por igual, dos contra dos y alguno de ustedes se encargará de traer a uno de ellos aquí, al hueco mundo. Bartz, tú les secundarás.

En cuanto a ti Kazan, vigilarás día y noche la ciudad hasta que te encuentres con alguno, también lo traerás y tú, Zetzuo le acompañarás. Los equipos formados no deben intervenir entre sí, saquen toda la información posible. Y No olviden que cada instante de sufrimiento en ellos será compensado en un futuro, quiero que demuestren su bravura, que les supliquen piedad y que le teman a la muerte.- Ladeó el cuello a la izquierda forzándolo a tronar. Las tareas eran por demás sencillas. Extendió la mano en señal de despedida pero permaneciendo sentada por si alguna duda les surgía o por si alguno deseaba derrochar arrogancia.